miércoles, 8 de junio de 2011

Medianoche en París, mediodía en la playa

Midnight in Paris, y Pequeñas mentiras sin importancia, dos buenas películas rodadas en la capital francesa.




Paris es, probablemente, la ciudad más cinematográfica del mundo, con permiso de Nueva York, claro. En ella se han rodado innumerables películas, y los mejores directores y actores han trabajado en esta maravillosa ciudad: Gene Kelly, Ernest Lubitsch, Billy Wilder, Roman Polanski…


En estos días, tenemos la oportunidad de ver dos estupendas películas que nos llevan de paseo por la ciudad de las luces, especialmente la primera. Se trata de la última obra de Woody Allen, que recupera su estilo clásico, de hace unos años, “Midnight in Paris”. Esta divertida comedia comienza con un homenaje fotográfico a París, y narra una historia de amores y desencuentros, animada por un original giro argumental. El maestro Allen es capaz de dar otra vuelta de tuerca a sus eternos temas, a la vez que homenajea a su querido París y a su público europeo. La película resulta más completa que el resto de sus obras más recientes, dentro de su línea “ligera” (aunque no llega ni pretende al nivel de “Match point”, la primera película de su trilogía londinense, que a mi entender, es la mejor de su filmografía).

En Midnight in Paris, disfrutaremos de los actores, y especialmente de Owen Wilson, que carga con la responsabilidad de transformarse en Allen, y lo logra con acierto. A destacar también la comentada aparición de Carla Bruni, de una estupenda Kathy Bates, y mi favorito, Adrien Brody en un breve pero divertidísimo papel.

http://www.filmaffinity.com/es/film567174.html

Pero después de un tiempo en la gran ciudad, por muy impresionante y monumental que resulte, acabaremos con ganas de irnos a la costa de vacaciones…en tal caso, nada mejor que ir a ver “Pequeñas mentiras sin importancia” (Les petits mouchoirs). Esta estupenda película comienza de forma parecida a muchas otras películas francesas sobre relaciones personales, pero un inteligente guión y unas grandes interpretaciones van atrapando, y acabé entrando totalmente en la historia. Las situaciones, cómicas y extremas, resultan a la vez familiares e inquietantes. Por cierto, la actriz francesa Marion Cotillard trabaja en ambas películas. La carrera reciente de esta actriz es impresionante, ya que actúa también en películas como “Nine” o “inception” (origen).


Las vacaciones de un grupo de amigos en la preciosa costa atlántica del sur de Francia evocan en el espectador situaciones vividas, veranos pasados, amistades y amores ya perdidos…menos mal que como bien dijo Humphrey Bogart, siempre nos quedará Paris.

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